martes, 29 de julio de 2008

Enema Opaco (enema con contraste)

Balaguer. Lérida. Cataluña.
Las técnicas de radiología comprenden muchos tipos distintos de radiografías. Con o sin contraste... solo óseas o hasta de las plantas de los pies (fotopodograma) Vemos con la ayuda de reactivos hasta los intestinos.... Y para ello nos servimos de enemas opacos o de contraste.
Explicaros la técnica en si, no creo que os haga reír.. no tiene nada de gracioso que te metan "un bicho" por el culo. Pero lo gracioso es que se pongan a manipularlo sin tener las debidas medidas de seguridad o todos los sentidos puestos en lo que se hace...o por que no...hacerlo bien.
Una mañana estábamos una doctora y yo, preparándonos para realizar un enema de contraste a un abuelete.
Las cánulas rectales que se usan para ello, llevan un globo de seguridad que se debe hinchar, para prevenir que se salga la cánula.
Y como es natural, estaba todo preparado, encendemos el monitor y vimos que la cánula no estaba suficientemente dentro.
Y la doctora decidió que en lugar de presionar solamente con la mano, había que "observar de cerca" y se colocó entre las piernas del abuelo. Y empezó a empujar...
Hasta que el abuelo se tiró un pedo....
Si solo hubiese sido eso, aun.. pero claro la doctora había abierto la llave de paso del enema y este había comenzado a entrar...
Lo siguiente que vi, fue ala doctora con una franja de contraste blanco que iba desde la frente hasta la barbilla y que me decía entre labios...
-Una toalla...
Yo comencé a reírme y tuve que salirme de la sala.
Os aseguro que yo, no le di la toalla, me fue imposible...
Espero que no me lo tuviera en cuenta.
Jajaja.
Saludos
MacDubh

3 comentarios:

AZAHARA dijo...

Yo a esto lo llamaría gajes del oficio...
Que mal se pasa cuando en situaciones que no es adecuado reirse no puedes evitar hacerlo, verdad? Pero mira que no darle nada para que se pudiese limpiar la pobre mujer! :-D

Niniel dijo...

Eso me recuerda a un caso parecido que me ocurrió cuando hice las prácticas de auxiliar de clínica (hará unos 12 años).

Había una abuelita de unos 90 años pequeñita como un pajarillo que llevaba varios días sin hacer de vientre. Como yo era novata, la auxiliar que me guiaba me enseñó a ponerle un enema a la poble señora.

Aún no había acabado de colocarle el enema cuando la yaya empedó a hacer de vientre. Aquello era un no parar. No sé cuantas palanganas llené, cuantas sábanas y toallas usamos. Creo que estuvimos alrededor de una hora para asearla. Cuando acabamos, salimos con un saco entero de ropa sucia sólo de ese cuarto y, literalmente, llenas de mierda hasta los codos, uniforme incluido.

Mi guía pudo ir a cambiarse, pero como yo no tenía más uniformes, tuve que ponerme la ropa de calle e irme a casa a ducharme.

Mac Dubh dijo...

Eso me recuerda a otra anécdota niniel, jajajaja si es que encima sois de gran ayuda. Besos