miércoles, 6 de agosto de 2008

De dos gatas


Rincón de Estamariu, Girona o Lleida no estoy seguro.
ya se que últimamente empiezo con una suerte de reflexión sobre mi, sobre los motivos que a veces me llevan a relatar tal o cual anécdota determinada. unas veces son recuerdos prescientes. otras veces son evocaciones motivadas por algún suceso del día. Otras sois vosotros con vuestros comentarios y algunas veces son solo asociaciones a la anécdota que me llevan a situaciones similares, a desencadenantes que en si son situaciones anecdóticas.
Pero hoy... en estos momentos no soy capaz de recordar nada que no haya contado ya.
Os podría contar como fue que me di cuenta de que me enamore por primera y única vez, por que se, que desde que esa mujer entro en mi vida; no habrá otro ser que la eclipse.
pero solo lo haré si ella me da permiso para que os cuente que pasó.
Por lo que se, di todo un espectáculo.
Sigo enamorado de ella...
Y si, os reiríais de mi si os lo cuento...
Por otro lado, se que hay más historias ahí dentro, acechando... por que si de algo ando sobrado son de historias.
Por cierto, he visto que últimamente se ha publicado un libro de anécdotas de enfermeras/os. Por si alguien está interesado. Seguramente esta mejor redactado que mis historias.
Bueno una historia de gatas...
teniendo yo 17 años, vivía en un piso de la ciudad y lo compartía con dos gatas... y el resto de mi fauna familiar.
Ambas negras, ambas muy "enamoradas de mi"
Una noche la mas vieja decidió dormir dentro de mi cama entre mis piernas. De carácter arisco y fuerte era preferible dejarla hacer así que no puse objeción... y parece ser que horas después la otra, la dulce y buenaza decidió hacerme compañía...
Y se colocó encima de la cama pero justo encima de la otra.
Y se despertó la de debajo.
¿Imaginais lo que es una pelea de gatas entre vuestras piernas?
Eso ocurrió a las 2 de la mañana.
La de dentro de la cama atravesaba la sabana,la manta y la colcha con las uñas, las cuales sobresalían del tejido y la de encima hecha una furia salvaje atizando zarpazos a la colcha.
Yo me quede quietísimo, por temor a que un zarpazo "me estropease algo"
Finalmente se pasó la furia desgarradora y ambas salieron corriendo de la habitación.
Más tarde me dormí yo con el susto en el cuerpo.
Por cierto, me ha hecho recordar otra anécdota sobre dos perras que tuve....
Así que igual empieza tanda de recuerdos mascotiles, jejeje.
No se...
Saludos
MacDubh

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estamariu ya pertenece a LLeida. Que bonito!!
En cuanto a la anecdota...hay que tener cuidado con los trios!!!
Ya se sabe, siempre manda uno/a
Besotes

Mac Dubh dijo...

Mmmm si que es bonito, pero más linda es la mujer que me acompañaba de la mano por esos rincones...recuerdos sus risas, su perfume, su cabello.. ains que recuerdos. perdona que me pongo sentimental...