miércoles, 17 de septiembre de 2008

Día 1 me pillais volando...


Bonsai,Girona 2007
A estas horas estaré en Barcelona, con algo de suerte habré besado unos tiernos labios para despedirme, habré rozado su piel, habré olido sus cabellos, habré mirado sus ojillos traviesos y su sonrisa que me enamora. ¡Si es que te quiero tanto mi Niña de Agua!
¿Qué os relato hoy?
Siendo sincero, cada vez me cuesta más y mas extraer recuerdos, ya que entre lo que se olvida, lo que se le da poca importancia... ¡Ah si!
Una de adolescentes...
Cuando se flirtea, se intenta conquistar... se va de "paseo"... pueden ocurrir hechos imprevistos... fortuitos, pero de graves consecuencias. Lo siguiente pasó cuando tendría unos 17 años.Puedo ubicarlo puesto que entonces yo aun vivía en la capital y me fui de allí con 19..
Salimos un grupo de chic@s a pasear por los Jardines del Mar, frente a las murallas que dan al mar, a los pies de La Catedral y el Palacio de La Almudaina...
Y después de las risas y de mucho caminar, acabamos en una conocida hamburguesería de la Avenida Argentina. Yo no tenía apetito así que pedí un batido de chocolate...
Y cuando me lo estaba tomando, alguien hizo algún comentario gracioso y el batido se me atragantó y se me fue por el lado equivocado.
Yo era incapaz de hablar y me ahogaba. Pero como todos reían supongo que pensaron que lo mío era cosas de la risa y no fueron conscientes en ningún momento de que me ahogaba...
Salí solo del ahogamiento...
Como pude se lo expliqué después....
Y aun les dio más risas.
Hoy comienza mi viaje pero también empieza mi regreso....
1 día menos para volver
Nos vemos pronto
Gracias por seguir leyéndome.
Saludos
MacDubh

2 comentarios:

Niniel dijo...

Casos como este los hemos padecido todos, me temo.

Unq vez me contaron el caso verídico de un chico de unos 30 o 40 años que se atragantó comiendo un franfurt en su casa. No sobrevivió.

También me suena el de un señor que se atragantó con una galletita. Se llamaba George. Por desgracia éste sí salió con vida...

AZAHARA dijo...

Tienes razón Niniel, creo que todos hemos vivido un momento de atragantamiento.

El peor que he visto fue el de mi tío hace unos años, bebiendo agua. Al principio parecía una tontería, pero cuando empezó a ponerse morado nos asustamos un montón... Se le pasó enseguida.
Y mira que se pasa mal cuando te pasa, eh? Uff, qué fatiga.

Te acabas de ir y ya se te echa de menos, Mac.